Como cada año, el 1 de diciembre se celebra el Día Mundial de la lucha contra el SIDA. Se trata de una ocasión para mostrar apoyo a las personas que sufren y viven con el VIH y para conmemorar a los millones de personas que han muerto y siguen muriendo a causa de esta terrible infección.
El virus de inmunodeficiencia humana (VIH) es el virus que se encuentra detrás del SIDA. Cuando una persona se infecta con VIH, el virus ataca y debilita al sistema inmunitario. El Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida o SIDA es la etapa de la infección por VIH caracterizada por la aparición de síntomas de algunas enfermedades relacionadas con el deterioro del sistema inmunitario.
Gracias al avance en terapias contra el VIH, hoy los pacientes afectados por el virus pueden vivir una vida larga y plena pues se han logrado ralentizar la aparición de enfermedades asociadas y cronificar el estado infeccioso.
El virus se transmite de una persona a otra a través de fluidos corporales como la sangre, el semen, el líquido preseminal, los fluidos rectales y vaginales y la leche materna. Además, una vez que una persona tiene el virus, este permanece dentro del cuerpo de por vida, por eso es necesario extremar el cuidado de la salud dental, puesto que, como hemos señalado, las personas que viven con SIDA son más propensas a contraer infecciones, especialmente infecciones dentales que, a su vez, pueden afectar a su salud general.
¿Qué consecuencias tiene el SIDA en la boca de los afectados?
La boca puede ser una de las primeras zonas del cuerpo afectadas por la infección de VIH. Una vez que el paciente contrae la infección, es mucho más susceptible a desarrollar otros problemas de salud bucodental que pueden causar dolor e incluso la pérdida de las piezas dentales.
Entre las afecciones bucales que pueden desarrollar las personas con este virus se encuentran:
- Boca seca o xerostomía, que puede conllevar la aparición de caries y daño en los tejidos blandos de la boca.
- Candidiasis o aftas bucales, producidas por una infección por hongos.
- Lesiones blancas a los lados de la lengua.
- Gingivitis de banda roja.
- Periodontisis ulcerativa.
- Sarcoma de Kaposi.
- Brotes de virus herpes.
- Úlceras en la boca.
Además de causar dolor, todas estas patologías o lesiones en la cavidad bucal pueden dificultar al paciente tragar o masticar con normalidad, algo que, a la larga, podría causar problemas de malnutrición y potencialmente contribuir a debilitar el sistema inmunitario.
¿Cómo prevenir los problemas orales relacionados con el SIDA?
La mayor parte de los problemas de salud dental relacionados con el SIDA se pueden tratar siempre que el paciente demuestre compromiso y responsabilidad con su salud en general. A la hora de prevenir estos problemas, desde Clínica Dental Estoclinic en Terrassa, consideramos que es muy importante:
- Visitar al dentista regularmente.
- Cepillarse los dientes y utilizar seda dental al menos dos veces al día. Es importante, además, que los cepillados duren, por lo menos, dos minutos.
- Tomarse la medicación para el SIDA a tiempo.
- Informar al médico si dicha medicación puede causar sequedad bucal y tratar de ponerle remedio.
- Mantener una correcta hidratación.
Por último, quisiéramos posicionarnos al lado de todos estos pacientes que se sienten señalados, avergonzados o incluso rechazados por una sociedad que con frecuencia los condena. Informa siempre a tu dentista si tienes dicha condición o tienes dudas sobre si podrías padecerla. La medicación es vital para frenarla a tiempo. Si tienes dudas sobre la trasmisión del VIH y sus implicaciones a nivel oral, no dudes en contactarnos. Queremos ayudarte!